15/11/11

No voy a compilarme


¡Sal de mí, monstruo!

Cuando me golpea la risa no puedo evitar sentirme en paz con todo el puñetero mundo. Clase, objeto o un no voy a compilarme a tiempo y estalla contra los dientes, contra la lengua, deja atrás la saliva que fue su cuna y se desmenuza en el aire como las migajas de una galleta que se parte. Y entonces, aunque nunca importaron las horas entre hojas sucias de papeles garabateados con números, de refulgentes pantallas ansiosas por chupar el tejido líquido de nuestros conocimientos, o de calor insoportable entre los campos de máquinas, la verdad es que todo se hace muchísimo más llevadero.

Últimamente puedo decir que, en ciertos aspectos, estoy muy satisfecha. Y el pooka Erik, demonios, ¡es tan guapo...!



Aunque, hasta que se le pase cierto mal, sea mejor rehuirle.

2 comentarios:

Annell dijo...

Come to the Dark Side...
We've got lucky charms!

Veo que eso de dibujar en las agendas es algo inherente a todos los estudiantes del mundo xD

Mew dijo...

Mira, me gustaba más el eslogan cuando prometíais galletas. Que vuelvan las galletas.

Je. Bueno, querida Annie, no todo es lo que parece... ¿quién te dice que esta sea mi agenda, mi mano la que dibuja, mi blog en el que lo cuelgo...?